COMPARACIONES
DEL LIBRO, VERSOS DE UNA SOÑADORA
Mirarte correr por el campo
es como mirar ese árbol detrás
de una manada,
con sus enredaderas altas
con sus hojas en tallo esbelto
y yo aquí en medio escribiendo
versos sin sentido, como pasto sin tierra
aquel que se come el ganado
es como mirar una yegua, tan sola, tan quieta,
mirando como los grillos verdes,
se posan en las hojas de una rama leve
que el viento en susurro las mueve.
Te veo en mis pensamientos
te confundo con las hojas secas que caen del cielo
a medida que caen miro ese cielo,
y encuentro un pino hermoso y tierno
mariposas blancas cantando en su encuentro,
también los grillos verdes hacen el concierto,
oigo hasta cigarras haciendo juego a la banda
cualquier pájaro que canta su tonada.
Ahora sale el sol, mi alma está encantada
pero como ella me encuentro solitaria, pero satisfecha
Como aquella abeja que se posó en mis manos
con sus rayas amarillas y sus alas anchas,
me mira sorprendida, se siente amenazada,
levanta el vuelo de nuevo hasta su casa.
Ves, contigo miro tantas cosas que sola yo no veo,
tú me contagias aire, tú me contagias cielo,
hasta las ramas secas, yo las encuentro verdes,
el cantar de un grillo es igual a un jilguero,
los caminos anchos yo los encuentro estrechos,
si me das una mano yo tu calor lo siento
sin embargo, eres tan joven, tan tierno,
tan bello como esta naturaleza que al frente tengo,
y yo como rosa marchita, como árido suelo,
como árbol caído que entre mis dedos tengo,
hoy no sé si te encuentro, hoy no sé si te pierdo
(Con Fernelly en el Campo- Agua bonita)
DOMOTA