Franco Castillo

Una vuelta más

Sobre algún polvoriento anaquel,

En telaraña recubierto,

Yace casi muerto

El sueño de un corcel.

De correr en campo abierto

Crin al viento, rumbo incierto

Pero el destino es cruel para con él.

 

Experto testigo de la alegría ajena,

Sus lágrimas oculta con el brillo del barniz,

Y con dulces melodías la agonía de su pena,

No hay fin a su condena, última vuelta y ser feliz.

 

Nada cambia aunque te aflija.

Fíjate en aquel cartel:

\"La suerte es de quien saca la sortija.\"

Aunque ésta nunca elija al animal de carrusel.