Enrique Dintrans A.

El pato y la señora

EL PATO Y LA SEÑORA

En amargo y largo rato
del pantano sale un pato.

Va molesto y aletea
por el agua de la aldea
que invadieron con jalea
de perversa y vil ralea.

Unos niños le han oído
cuando pasa distraído

chapoteando junto al gato:
¿Quién es ése que alardea
por el charco, dolorido?


Con disparos de escopeta
o las piedras de una grieta

se ha llenado su camino:
\"Yo soy pato florentino
y me inculpan desatino
cual si fuera mi destino\"

Y adelanta sus razones
cuando le atan con cordones:

¡Salgan de la jugarreta
yo soy príncipe del vino
y dispensador de dones!


Entre tanto los halcones
han dejado los balcones.

Y se lanzan en picada
como el ojo de una espada
¡Quieren ver sacrificada,
esa voz del pato dada.

¿Qué será del pato ahora?
¡Ah, lo salva una señora!

Y se enfrenta a los bribones
con fiereza emancipada
en afortunada hora.

 

E.D.A