pani

LA VIDA, EN UN SEGUNDO...

 

 

Dejad el llanto plañidero: ¡Acaso no intuís...

que la savia del viejo roble es demasiado bella,

y no conviene desperdiciar su dorado latido... !.

Yo sé que el arroyo es una corriente limpia y sosegada,

donde la felicidad se advierte desnuda y sin cumplidos.

Porque una sonrisa siempre

será infinitamente mas hermosa...

que las promesas deshojadas, al borde del camino.