Patricia A. L.

Cadencias de la Tierra

Insignificante razón,

que no comprendo,

 

naciente, incipiente, transparente

como el tenue y oscuro alba

de hechizos

y angustias sin remedio.

 

Se hacen carne, sin permiso

en los profundos y hondos

pensamientos e ilusiones rotas

que me ungen 

el alma de terrores

por las noches,

 

( Y llegan a los denodados huesos

de mi cuerpo)

 

Vivo de sentires propios

de serpientes y ángeles

y en la corteza dura

del Planeta.

 

Luz, nieve y auroras decadentes,

se hacen míos 

en la las noches

de Insomnio permanente,

 

(y en los locos, voraces e inasibles,

cadencias y latidos

de la Tierra)

 

(Patricia)