FELINA

EN EL MURO DE MI LAMENTO

EN EL MURO DE MI LAMENTO

Desorbitado el pensamiento,
me bloqueó el sentimiento
y quedé en la nebulosa,
sin el jardín, ni la rosa.
Y, en el muro de mi lamento,
dibujé mi sufrimiento…
lo dibujé con tinta sangre…
de mis arterias, la misma sangre.
Y, un sopor muy frío,
recorrió el cuerpo mío,
me paralizó el habla,
me hizo temblar el alma.
Y mis lágrimas sangraron por la herida…
esa herida, que está abierta todavía
y, en el irrisorio pensamiento de tu ser,
fenece un amor…un amor que no pudo ser.
Felina