Santiago Esquivel

Retrato de un abrazo.

Había pasado tiempo, muchos días y muchos meses. Ni siquiera recuerdo cuál fue el último abrazo que alguna vez nos dimos. fue esplendoroso e inefable. Toda una eternidad de sentimientos mutuos se resumieron entre caricias sublimes, abrazos inpensados y miradas inundadas de lágrimas melancólicas. Holográficos Instantes infinitos renacieron en las calles. Hoy ha nacido el abrazo más esperado del mundo... La magia se escurría entre nuestros cuerpos, el cariño mutuo nos quemó todas las palabras. Todos los pájaros comenzaron a cantar de nuevo, todos los suspiros del tiempo se refugiaron en mi boca. Nada más transcurría en el mundo, sólo éramos los dos habitantes existentes del planeta. Sólo éramos tú y yo.... yo y tú.... si, nosotros, ambos, juntos, y juntos Creamos una burbuja donde no transcurría el tiempo. Juntos creamos el abrazo más cálido de toda la existencia. El tiempo no tenía límites ni poder sobre nosotros. Fueron Mil segundos por minuto, mil millones de infinitos resumidos en tus brazos.