VITRALES DEL ALMA

MI DIARIO: ¡DULCE VÍNCULO DE AMOR!

 

 

 

 

 

Envuelta en un mar de extrañas sensaciones y una nube bordada de alelíes. De pronto delirante remolino formó un círculo en derredor mío. Silencio mortal se presagiaba… Pero no, un vaivén de dulces melodías gratifico mis oídos. ¿Qué era aquello y porqué así?

El dulce sabor de tus versos había germinado en lo recóndito de mi corazón, un dulce vínculo de amor.

Con la sangre y fuerza de tus poemas, tan apacible situación, danzó vigorosa formando un camino, dando alas a la imaginación.

Aquella escena conjugaba a la perfección, con el ímpetu delirante de mis escritos. Hilo imperceptible que tiñó de rojo, tiñó de vida, tus letras y las mías.



¡Torbellino de versos, melodías y radiantes colores!
¡Cuánto diera por volver y tomar para sí, el retazo de amor prohibido que aquel instante puso en mis labios, en mis sentidos!


El manto onírico que me envolvía, rasgó magnánima visión, justo antes de las tres de la madrugada. La noche era noche y su sabor se difuminó. 
  Las estrellas que miraba lejos, enviaban a mi intelecto divina fulguración, transportando a lo imperecedero delicada germinación.


Y una lágrima,


Si,


Una lágrima furtiva, rodó por mis mejillas.



Luz Marina Méndez Carrillo/10/03/1019/ derechos de autor reservados.