Armando G.

No me impidas despertar el deseo

Aceptas un beso, un abrazo,

el calor de mi pecho,

mi cariño, la compañía,

el amor de cada dia,

mas no me prohíbas despertar el deseo,

no me impidas que te traiga a mi lecho,

no me niegues la fuerza de tus verbos.

 

Aun escucho tus palabras,

tus gemidos, tus placeres,

aun tiemblo de deseo

aun no despierto del sueño

de hacerte el amor,

de sentir tu cuerpo

 

Fue la entrega, sin temores,

sin frenos, ni pudores,

fue dar sin pedir,

fue toma lo que me haces sentir

 

Quizás perezca un sueño,

es posible,

solo un recuerdo,

pero fue real,

lo sentí,

hasta mi lecho olía a ti

 

Ayer provoque el deseo,

cause las locuras de tu cuerpo,

ayer desperté la mujer que duerme,

la que necesito en mi lecho.

 

Fue un estado fisiológico,

un aviso un recuerdo,

que aun eres mujer,

que no pierdas mas tus noches

sola en tu lecho

que te entregues a mis besos

a mis caricias

al disfrute del amor.

 

No importa que no recuerdes

los sueños son causados

por los duendes caprichosos,

que buscan que esté cerca de ti cada noche ,

para proteger tus sueños

para de ti cuidar.

 

Después de tantos placeres,

de la entrega que a mi diste,

dormiste tranquila pausada,

descansaste placentera,

mientras a tu lado te miraba

tu reposo yo cuidaba.

 

Llegue,

solo llegue y no estabas,

entonces descubrí que solo estoy,

cuanta falta haces en mi lecho,

en mis sueños te buscaba,

bajo mis sabanas no estabas,

sentía frio

te necesitaba,

no estar contigo,

no besarte en la mañanas

estar a tu lado al despertar,

tu ausencia es un problema

que no consigo solucionar