Coty

Postal de julio

El séptimo mes

suele pasar casi desapercibido en el pueblo,

más no ésta vez,

reivindicado con el feliz acontecimiento

del proyecto de riego convertido en realidad.

El agua, para los campesinos marca

la diferencia entre éxito o fracaso,

así de simple.

 En el campo,

sustentamos  nuestra vida y familias

en torno al vital líquido que define

dicha o quebranto.

Asegurar agua para un cultivo

en un escenario dónde impera

la aplastante realidad del cambio climático

es mucho más que la cómica figura

de una asociación de regantes que algunos perciben como

 \"andar todos con un balde de agua en la mano\".

Pacha Mama está agotada

por la imparable destrucción a su alrededor

ya no llora de alegría con cada estación lluviosa

más se seca en agonía y sofocante calor

en una canícula interminable.

El agua es vida, 

El agua es esperanza y regocijo.

El agua es alegría

por la oportunidad de volver a ser

productivos y felices

en torno al trabajo digno

de hacer parir la tierra

los frutos esperados.

El río lo sabe.

La Tierra ya no será jamás la misma.

Pero gota a gota,

Juntos,

podemos hacerla florecer de nuevo.

Gracias, Padre,

por tu bendito julio,

mes de la promesa cumplida!