Iván Terranova Cruz

El triste canto del olvido

 

 

Abro mis ojos

Y tu te enciendes como un diamante en la distancia

Abro mis ojos

Y tu húmeda luz  llega... como un  destello malherido

 

Al parecer...

Hoy,  a  elevado su voz el triste y mágico desencanto 

de nuestros hechos

Es nuestra memoria. la que se cristaliza y cae como la lluvia

por la ventana del tiempo ya vivido

 

La piel de lo imposible se levanta

Una sombra indolente llega... nos abraza y nos  besa

en las mejillas

Y a nuestros pies

Los últimos ensueños nos esconden sus caminos

 

Quizás pueda más nuestros resentimiento

Quizás la estúpida intransigencia nos haga suyos

Quizás viviremos velando por siempre

y para siempre

 

este húmedo cádaver llamado olvido