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A Mario Benedetti

Oh padre, que me has guiado por los caminos de la poesía, la salvaje, humana, brava, la atrevida, la amorosa, creaste con tu teoría de conjuntos, algo más hermoso y pleno que la belleza, y que toda la marrullería de los científicos y su complaciente teoría del big bang.

Tu el encarnizado en la lucha social, al que jamás le sofocó un fusil o la misera opresión de un tirano intransigente.

Quien jamás forjó un hierro para herir al maldito o al inocente, a quien solo le bastó, la justicia poetica, la sabía palabra, el encarrilamiento de los sonoros ecos ligados desde la humanización de un pueblo que clamaba paz, libertad y soberanía.

Donde está el rostro de vos, tus bodas de perlas, en que rincón se ubican los formales y el frío para llorar con ellos está angustia, y que sea menos el dolor, ¿donde? cielito... cielo que si.

Daniel Viglietti, Cleotilde Acosta (Nacha Guevara) y Dario Grandinetti, llorando tu muerte están, mas si arriba Dios existe, más si arriba Dios está, traerá resignación futura y a nuestra alma...pronta paz