L' Sefer

Escrito auto obligado. (...)

Tengo el silencio en mi cabeza,
Una vez más mis sentimientos arrancados,
Por esto que le llamo conciencia,
Porque se ha roto algo muy profundo,

No siento ya razones, lo siento.
Este año me ha robado el todo,
O me hado lo que me ha faltado,
O todo en mi ha acabado, lo entiendo,

Me he lanzado al poso sin saber nadar,
Es más mi cabezonería que mi valentía,

Necesito escribirlo aunque no fluye,
Ya nada me influye, construye o afecta,
Ver a mi querida alma desgastada,
Solloza, cortada, triste y ahogada..

Rompió cualquier realidad que sostengo,
Porque ya la he perdido con sus palabras,
Con su “tú si me dejarías”,
Cuando ya estaba roto por sentirla hundida,

No siento ninguna culpa,
Porque se ha mezclado con la tristeza y rabia,
Ese amor triste que promulgo como odio,
A este mundo que jamás me ha dado descanso,

Lo bonito y la fuerza lo veía en ella,
Pero me pidió con esa misma belleza y fuerza,
Que me fuera y que no la encontrara,
No la buscara aunque sabia no duraría,

Todo en mi se agotó,
El que planeaba se aburrió,
El de la ira se calmó,
El niño creció,
El de las llamas se apagó,
El dudoso se decidió,
El que veía se enceguezó,
El conciliador se calló.

Ya no hay nada.
En mi cabeza solo hay silencio,
En mi pecho un real y físico vacío,
Ahora es cuando todo me hace gracia,
Porque necesito esas risas fingidas,
porque he elegido la tranquilidad a la felicidad,

Ver que hay tantas razones por desaparecer,
ver que no tengo sentido,
sentir la verdadera nada,
que la incertidumbre conmigo ha perdido

Saber que me cuesta escribir esto,
Porque realmente no lo quiero,
No sé cual es esta etapa o momento,
Y si es eterna no me importa o afecta,

Recordaré mucho ese primero de junio,
como el cuatro
Cuando vea lo negro de este mundo de nuevo,
Y mira que he escuchado a los que ama,
Planeando mi muerte…

 

Hoy seguramente soy más consiente que estoy más solo,
Que llevo siete años aceptándolo, pero hoy, y solo hoy,
Soy consciente que realmente es lo único que conozco,
Por eso jamás tiré la toalla, aunque sea por retar al universo,
que para él soy irrelevante.
Que desconozco la perdida porque jamás he tenido nada,
es así que jamás he deseado nada absolutamente nada.