Ricardo Gerarduzzi

Una vieja obra de arte

La lluvia monótona danza

sobre el frío pavimento,

interpretando un lamento,

un llanto de amargura.

Promesas que escritas en la luna,

a puño de amor y deseo;

a causa de nuestra locura,

menguaron con el tiempo.

 

Las risas dibujadas en los aires,

con la brisa del verano;

en grises tardes de domingo,

sin despedirse, se deshojaron.

Ya no hay notas en el viento

ahora que no estas conmigo,

ya no existe ese latido

que unía nuestros corazones,

esa música sin instrumento,

que no entendía de razones.

 

En otros labios posarás los tuyos,

serán de otro tus ojos negros,

se desnudará la noche a sus espaldas

y verterá su magia sobre sus cuerpos.

Pasarán las tardes caminando juntos,

fabricando besos de monotonía,

y cuando el mundo los deje solos,

repartirán caricias al morir el día.

¡¡todo eso pasará!!.

Pero cuando el alba se escurra

sigilosa, por los cristales de tu ventana

y desnude con su luz

cada pliegues de tu cama,

se pintará un recuerdo

a lo largo de tus sábanas.

No seremos mas que eso,

una obra de arte olvidada;

que con el paso del tiempo

es solo una pieza gastada,

una tinta vieja sobre el lienzo,

un cuadro ya sin alma.