kavanarudén

Soliloquiando

 

 

Dejé que mis pensamientos se perdieran en el amplio cielo.

El sonido de las olas acariciaba mis oídos con su acompasada melodía.

Caminé despacio dejándome llevar por el momento.

Respiré profundo queriendo retener todo el aire en mis pulmones.

El sol acariciaba mi piel mientras la brisa besaba mi cansado rostro.

Miles de conchas esparcidas en la orilla; cementerio silente de ilusiones.

Dejé que me invadieran los sentimientos no pudiendo evitar alguna lágrima.

¿Quién eres? ¿Quién soy? ¿Qué quieres de mí? ¿Qué espero de ti, vida? 

Sigo caminando esperando un no sé qué, que quizás está por venir o jamás vendrá.