El halo de pasión es cristalino
y frágil como tierna mariposa,
su arrullo de ternura es una rosa
con pétalo de seda purpurino.
Es toque de campana matutino
que trae de ilusión su luz preciosa,
y cruza por el cielo glamorosa
igual que del canario el dulce trino.
Es bello amanecer en primavera
del alma que de amor se encuentra henchida;
de hortencias lleva esencia mañanera
y brilla cual cual luciérnaga encendida;
haciendo paraíso la quimera
que llena de fulgores nuestra vida.
Autor: Aníbal Rodríguez.