rosi12

Los leños

Carmen golpeó la puerta,

esta se abrió una suave

aroma a monte remontaba

en la habitación...

La música era suave y

atravesaba sus sentidos,

con nuevos colores,

Ignacio se había marchado

hacía dos años buscando

otros rumbos, y ella

había permanecido sin

amor sin pasión 

más que  por los pájaros

que veía por su ventana.

La alcoba era cálida el se

había ocupado de encender

los leños mientras 

salió a comprar algo de

beber, ella vestida de entero

morado, lucía resplandeciente,

como aquel primer día

que se habían conocido

en la alborada estival,

casi críos, casi inocentes 

habían dejado de serlo,

Nuevamente el destino

le barajaba nuevas

cartas aquellas de corazón

y pique que tan bien

sabían jugar de a dos.