Soy jardinero exclusivo de mi florido jardín,
Tengo claveles, crisantemos y gladiolas,
No faltan las rosas rojas y un girasol en la esquina,
Un jazmin color de cielo, azucenas y amapolas.
Pero les cuento...estoy triste, con un vacío en el alma,
He perdido un colibrí que venía por las mañanas;
Cada día lo contemplaba por mi límpida ventana
Aletear alegremente sobre el manto colorido,
Sus alas aterciopeladas no acarician mi mirada,
Ya no succiona las mieles de todas mis flores vivas.
Sufro pensando quizá que un furtivo cazador
Le interceptó en el camino hiriendo su corazón,
Extraño aquel aleteo con suma velocidad,
Me hace falta su piar...y buscarlo yo no quiero,
¡Que tal si se ha ido por su propia voluntad!
Me mataría saber que otro jardín encontrara
Y que otras mieles buscara en alguna rosa extraña.
Me dedicaré a esperar esa mañana feliz
Cuando le vea regresar, y si tuvo algún desliz,
Yo lo sabré perdonar.
Si lo ven, denle aviso...que ya es mucho mi penar.
(VOZDETRUENO)