Peniel Ramirez

12 noumquams de mil.

Nunca volví a otra pared, como a la que veía con tu nombre.
Nunca volví a reír como cuando rompías el silencio camino a los dos pinos.
Nunca escuché la música como con Luis.
Nunca murieron mis abuelos.
Nunca crecí tanto como para no ser feliz.
Nunca creí en la falta de inocencia de Nancy.
Nunca nos perdimos, ni ahora.
Nunca dejé de amarte, Sol.
Nunca he dejado de temerte, Leona.
Nunca me fui de la puerta de Paulino.
Nunca me mudé de mi pueblo.
Nunca viajé tan lejos.