Yamila Valenzuela

Solo así.

 

 

 

Se mecerán los sueños con la brisa

refrescando siempre el amor que se enraíza

en cada palpito de tu corazón y el mío

avivando el calor que a nuestros centros une.

 

Cantará el viento cual cigarra

dándonos la vida y la esperanza

que vivirá por siempre en nuestras almas

en cada madrugada y atardecer en nuestra playa.

 

Tomados de la mano caminaremos

con sonrisa al viento, con miradas de te quiero

y en las tardes de verano intenso

refrescarás mi alma con suaves y tiernos besos.

 

Abrazarás mi cuerpo, me recostaré en tu pecho

sintiendo la fuerte tonada de tu corazón latiendo

y en ese callado y sublime momento

sentirás cuanto te amo y volarás en mis sueños.

 

Llegada la noche me tendrás en tu lecho

acariciando mi rostro, será mi cielo

pasarán las horas, los días, los años

y el destino sonreirá por habernos juntado.

 

Seremos viento y marea

agua pura de manantial

mariposas que despacio vuelan

pluma al viento de eternidad.

 

Seré música para tu alma

el tiempo grande donde vivirás

la sonrisa de tu sueño que te espera

ese mar donde navegarás.

 

Serás mi fuerte cimiento de amor eterno

el baile de mi vida con serenidad

la brisa que guía mis sueños en vuelo

los brazos que me lleven a la felicidad.

 

Seremos luz en las sombras de los caminos

con aroma que nos dará paz y tranquilidad

la fuente inagotable de los besos soñados

una brisa tibia que nos abrigará sin cesar.