Yamila Valenzuela

Lo declaro ante usted.

 

 

 

Venga, por favor, siéntese a mi lado

le voy a hablar como lo haría

un hombre enamorado

de la muchacha más linda de su barrio.

 

Venga, caballero de armadura plata

de pocas palabras y de ojos gachos

de sonrisa y mirada discreta

de perfume de una vida entera.

 

Lo he visto caminando despacio, solitario

bajo una lluvia de esperanza interna

y con esa sonrisa que le delata

como quien espera que el amor lo vea.

 

Confírmeme que no es casado

que anda solo en la vida

pero que espera que alguien le diga

que desea compartir sus sueños y su compañía

para que las noches dejen de ser frías.

 

Sé que está nervioso al saber lo que le propongo

pero me gusta y quisiera conocerlo más que un poco

hablar algunos días, conocer de su vida y usted de la mía

y quizás después de un tiempo podríamos enamorarnos

y tener nuestro propio cielo.

 

Lo observo

siempre espera que el sol se duerma

sentado en su puerta frente a mí acera

y sigo cada uno de sus movimientos

adivinando, imaginando, cuales son sus pensamientos.

 

Le propongo; largas conversaciones, noches cálidas

música de amores, paseos en las alboradas

pero si le gusta dormir mucho

lo hacemos en las tardes, en la playa.

 

También podemos ir al cine, al teatro

a un concierto, a comer un helado

mientras nuestras manos se rozan

y nuestras almas el amor han ganado.

 

Si quiere conocerme un poco más

deme una señal, esa que le voy a indicar

cuando el gallo cante por tercer vez

asomado a su ventana lo quiero ver.

 

Entonces cuenta me daré

que se interesa por mí

y usted vera dibujarse en mis labios

una sonrisa que siempre mantendré.

 

O también puede escribir unos versos

donde diga que se interesa por mí

que le gustaría que se unieran nuestros centros…

no tema, le diré que sí

 

Discúlpeme, no le digo más

sepa que aquí hay una mujer que lo mira que lo piensa

queriendo cubrir su desnudez de alma y piel

porque ella lo necesita también.

 

Y que a su vez usted la ame con amor fiel

es todo lo que le pido

caballero de armadura plata

de surcos de tiempo

y perfume de vida.