Ángela Páez A

Te pasarà y lloraràs. Tu que duermes tan tranquilo

en la latitud del tiempo, tan lejos de las manos que no tocaràs, 

tan cerca de las promesas que romperàs; hundiéndote en noches pasajeras 

y brazos de un Don Juan. Seguiràs mintièndole al espejo

por ser quien no vuelve cuando hay ruinas

y sobra tempestad.