Eiden Phendragon

Dama De La Poesía

Alguna ves soñe con esos ojos que desgarraban el alma, mostrando la claridad de mi demencia posada entre tus suspiros.
Augure con un baso en la mano y el humo de entre mis labios las palabras del adiós. Había olvidado recordarte poderosa, con la mirada fijada en mis miedos. A sabiendas de que todo cuanto soy pertenece a ti y al sonido de tus dedos. Me negué el derecho sobre ti, sobre tus muslos y el fulgor de tu danza. Duplique cientos de veces tu figura en mi imaginación, muriendo al contacto de mis dedos. Ahora, de noche y en la penumbra de mi amanecer, abro los ojos ante una realidad que aplasta mi horizonte. Dama de la poesía en mi interior, criatura devastadora de sueños. Vuela frágil ante mi cielo y revuelve mis entrañas con el néctar de tu voz. Que seas tú la aurora en mi ventana, el ángel de mi apocalipsis... La musa entre mis renglones y la inspiración en mi corazón. Porqué solo tú eres dueña de mi dolor, la única conquista que mi corazón reclama... La única en mis pensamientos.