Rosita de Mendoza

Nomeolvides

Camino prendida a tu pecho

como un ramito de nomeolvides

Florcita azul del campo

silvestre y desordenada

se hunde de tristeza cuando te vas

y revive en primavera cuando regresas

En la soledad del invierno

se desarma y se hiela

se quiebra y desaparece

Nomeolvides 

estoy a la vera del camino

abro mi corola de cinco pétalos sencillos

cuando tu presencia entibia mis raíces

Nomeolvides

arráncame suavemente del suelo donde vivo

y llévame siempre contigo