Julio Noel

Al puente

Ojos azules, de claro mirar,

que estáis del espejo enamorados,

que el aire ilumina vuestras pupilas

con besos aromáticos,

que vuestras miradas al cielo ríen

en los días más claros,

que las hojas de los chopos verdecen

sólo por contemplaros,

que estáis ya exhaustos de ver pasar

el incesante fluir de los topacios,

de las verdes esmeraldas y el vuelo

de los amores garzos,

¿por qué en vuestras cerúleas ilusiones

no me dejáis miraros?

Ojos azules, de claro mirar,

de vosotros mismos enamorados,

que el aire acaricia vuestras pupilas...

¡ay, dejadme miraros!