Jhon Deivy Torres Vidal

El SUEÑO Y EL INSOMNIO

Abandonarse al cauce de los sueños,

a su caudal fluctuante y misterioso

flotando en superficie o sumergiendo

la frente, el grito, los sentidos plenos,

conlleva otra verdad, un nuevo gozo,

que en apariencia surge del silencio

inhabitado y dúctil, y es en el fondo

un grito que traspasa el miedo.

 

Un conmovido y penetrante insomnio

al placer de sus aguas me ha hecho ajeno.

Tan sólo al asomar me ahogo

en su orilla insegura y ya no puedo

ni hundir un solo pelo o un dedo solo.