walter rafael aguero gomez

Huir de mi sombra.

La niebla es velo

que cubre mis días caídos.

La sombra es arena movediza

que me ahoga en mi pasado.

Escapo

 dejo atrás sus falsas ilusiones.

Busco respuestas

a interrogantes que no conozco.

La vida,

ese jardín 

que se volvió un campo de batalla,

quedó desnuda

ante la energía del amor.

Me abro,

descubro que el miedo me paraliza;

no puedo competir;

nadie coopera con mi existir.

Por el laberinto de mi vida, 

camino,

sin encontrar lo prometido.

Allí está,

en mi eterno presente,

en la alta vibración de darse,

en cada instante,

 en cada detalle.

Merezco amar, 

ser amado.

Mundo irracional

envuelto en un traje emocional.

Desconexión humana,

revolución digital

del \"me gusta\",

del \"comparto\" y luego existo.

Experiencia mística,

proyección de la divinidad.

Me regalo al próximo

vestido de amor.

Suelto el niño

que corre delante de su sombra

sintiéndose perseguido.

Descodifico mis miedos...

La sombra del pasado no existe.