ADANS BECMAN

SIEMPRE SE ASOMABA AL CAMINO...POR SI LO VEIA VENIR...

Siempre se asomaba al camino

para ver si lo veía llegar

era una espina,una llaga

que no dejaba de sangrar

por la falta de aquel hijo

sentado a la puerta de su cortijo

perdido en su soledad,

siempre mirando el camino

de noche se solía acostar

soñando que lo podía abrazar

se levantaba temprano

el horizonte en su corazón

pensando en lo que había perdido

lloraba por la emoción,

telaraña en un rincón...

En un lugar lejano

un jovén se lamentaba

pasando fatigas y dolores

cuidando cerdos estaba

hambre de pan y cariño

en su alma se colgaba

un hombre hecho niño,

que un día salió de su casa

buscando la libertad

hoy llora y suspira

soñando con regresar,

seguro que mi padre me está esperando

pero como me puedo presentar

si he sido un mal hijo

no me puede perdonar,

lágrimas de azúcar y bronce

en un bote de cristal

sueña el río y se rompe

soñando con la mar

y un ramillete de flores

yo te quisiera cortar

para ponerla en tu frente

y pensaras en regresar

que es cosa de valientes

si se sabe rectificar,

alborada en los siléncios

de la triste soledad

mira que hay barcos de plata

navegando en tu mar...

Voy a regresar a casa

y a mi padre le diré

pidiéndole de rodillas

¡ por favor, perdóname !

¡ yo se que he pecado !

y no soy digno de tu querer

déjame está como un criado

y así te serviré...

Siempre se asomaba al camino

para ver si lo veía llegar

era una espina, una llaga

que no dejaba de sangrar,

hoy se ha levantado temprano

para mirar en la lejanía

y ve un mota de polvo

de alguién que venia

hecha a correr y lo alcanza

el hijo llora y se arrodilla

el padre lo levanta y lo abraza,

en el cielo hay una sonrisa

porque el amor el fuego apaga

cura el corazón y cierra las llagas

el hijo mirando a su padre

siembra manantiales en el alma...

Lágrimas de azúcar y bronce

en un bote de cristal

hoy no son lágrimas de pena

estas si que son de felicidad...

 

Versión personal de la párabola

del Hijo Pródigo...