hectorjara_millo

El castigo de amerte.

Cuando te miro, suspiro,
y cuando pasas me dejas perplejo.
En mis sueños gimo tu nombre
cual cenzontle anuncia la alborada.

La pared azul de tu aura
que guarda el hermoso lucero de tus ojos,
la dulzura de esa mirada;
la cual me cautiva aunque no me veas.

El capricho que a tu corazón oprime,
ese que no deja que sienta el calor del amor;
es el que me rompe y que en lo profundo se esconde
y que refleja en la mirada cautivadora el temor.