GotadeRocioAzul

La lira emocionada no se agota

 

¡Qué grato disfrutar romanticismo!

Llenarnos de su orgásmico desvelo,

sentir que nos atamos al anhelo

y al délfico pilar de su lirismo.

 

Impronta que se acopla al virtuosismo

se nutre de la musa en su revuelo,

del frío o del dolor en cada duelo

y escapa del rencor, del egoísmo.

 

La lira emocionada no se agota,

se yergue en demasía y nos cautiva

dejando el alma plena en cada nota.

 

Sublime es la razón que la motiva,

mirífico el placer que la denota

ilusa, impredecible y atractiva.

 

Aimée Granado Oreña

Gota de Rocío Azul