Jose Viramontes

Inicios de una primavera sin nombre

Iniciamos de nuevo, con las mimas palabras de siempre

las mismas intenciones y,  las mismas miradas de antaño.

Así es como comencé a conocerte, con tu caminado apresurado

Porque ya era tarde y tu singular sonrisa de que ya era tiempo.

 

Atrapados entre las largas calles de tu presencia y,

Mi inusual palpitar al presenciar tu respuesta.

Quizás ese fue el comienzo a lo que le llame primavera,

Quizás ese fue el comienzo de mi larga espera.

 

Con un caminando apresurados nos topamos de imprevisto,

Voltié casi al instante y tomaste las palabras del viento

Y Dijiste: Si, ¡Hola!

Y fue entonces cuando las palabras se me fueron al cielo,

Y el cielo se me vino al cuerpo, y me solté riendo.                      

 

Afinando el paso y retocando las voces.

Se acabó el invierno y han gritado mis emociones,

Una primavera sin nombre.