Porque a él juraste lealtad
y entregaste terreno fértil de tu naturaleza
y haz cultivado más de un hermoso fruto.
Más la rutina es insoportable cuando lo que haces no llena tu corazón
y tus expectativas hacia la búsqueda de la felicidad cambiaron
pero tu romeo no lo notó.
Cuando no posees ni recibes la chispa de lo que realmente enciende el deseo de vivir
y careces de las ganas de una nueva mañana;
Y fuí yo, distracción y atadura, un salto a tu realidad.
La excusa de un nuevo perfume que definiera el encanto de tu nueva mentira
engañando tus años y engañando tu verdad
y se logró, mas de las veces a pensar.
Casi un lustro de estar juntos
tanto tiempo de locura,
dando vida al triste luto de tu tierra ya infértil
hasta que el roble se hizo cenizas
y al apagarse las llamas nació un sentir profundo
llamado conciencia
Cuando ya hasta tu fruto se ofrecía servido a mi bandeja.
Desde entonces me convertí en aquel turista que visitó tan acogedora tierra, de la cual me quedan bellos recuerdos.
La vidad es una poesía.