Santiago Miranda

Olvidamos también la belleza

 

De la luz, luego
Simplemente luego
Nos acostumbramos
A la revelación de lo dado
Habitando su ineludible presencia

¿Cómo volver a encubrir de ausencia
Todo de cuánto solo a nosotros
En tanto nosotros, nos ha sido
Revelado, a la fuerza del otro?

Es necesario asombrarse del día
Cotidiano que antes que día es 
Proyecto visible de lo infinito

Más allá de la amputación matemática
De posibilidades inconcluyentes, no definitorias
En el sol que contiene un átomo de polen
Y el gravitante amor que repele o atrae 

Entre fuerzas invisibles por lo mismo aún
Incomprensibles para el ser concreto que cree
Que es porque sólo va siendo / es necesario deslumbrarse
En la noche innata, interna, eterna: el viaje

Entre sueño y sombra, desconocerse entre-tanto
Mal conocido e incierto, no ver a través del ojo
Profanador del uso sino de la belleza del milagro
Abre la visión del ojo divisible; ¡Cuánta luz en todo lo perdido!



28/3/19
7/4/19