brayan alessandro

MIEDO

Unas cuantas cabezas en el jardín,

Los cuerpos, antes vivos, me bailan,

La sala está llena de una orquesta, 

Resonante y vivida con pólvora maldita.

 

La sangre, hecha ya una obra de arte,

Colorea los muros de mi casa,

Lame con su lengua bífida mi suelo,

Armonía y acordé en todo su maltrecho.

 

Todavía lo veo, las órbitas oscuras,

Labios moldeados por la muerte,

Su carencia de lenguaje es intimidante,

Es el, el juez de mis acciones.

 

Ahora solo quedó yo,

Ahora solo está el,

Puedo ver claramente, el amuleto de mi perdición,

El cañón de la muerte,

Al rey de la miseria.