Reposa pluma del alma,
te voy a dar un respiro,
mientras mis pasos vigilo,
pues abrupto es el camino,
y yo necesito calma.
Hoy cerraré mi tintero,
la tinta perder no quiero,
limpiaré bien tu plumnín,
dentro del cofre de cuero,
el del centro de cofín,
te guardaré con esmero.
Te estrené un día gris,
cuando el cielo lloraba,
lo que quería mi alma,
pero mis ojos negaban
y el cielo lloró por mi.
- Hoy siento mucha tristeza,
aunque el sol brilla en lo alto,
algo se hizo mil pedazos,
lo quiero reconstruir.
Es la perdida y la pena,
de uno que se ha marchado,
dejó en mi vida un legado,
que guardo dentro de mi.
Momentos grandes y bellos,
esos solamente quiero.-
¡ Cabalga ahora el cielo,
mira abajo alguna vez,
y vela el jardín de flores,
a tu jardinera hermosa,
que ahora cultiva las rosas,
que tu sembraste en el.!
Si, ya terminé presumida,
no temas no lloraré,
ahora descansa ¿ quien sabe?
si en un tiempo te rescate,
y juntas, escribamos otra vez.
Dolores Egea ( Lolaila)