ubik

ORFEO

Siempre presentida

turbiamente amorosa 

a mil tatuajes de profundidad

pulsas la sílaba del instante 

 

un piano deshoja los pétalos

en su ataúd de primaveras 

melodía vertiginosa de tus cabellos 

 

vestigios de la noria 

carambola del arpa

 

adviene el mundo de los no nacidos 

las púas del reloj

ofrecen un cáliz de licor

que incinera nuestra sangre compartida