DEMÓDOCO

EL TEMOR ES A VECES COMPAÑERO, PERO EN OTRAS OCASIONES TE CONSUME

 

Por Gretel Sally JIMÉNEZ POMÁRICO

 

Sólo pienso en disiparme, libre entre los aires

Flotando entre mi propia existencia,

Evaporándome en todas partes

Dejándome llevar hacia un lado y hacia el otro

A todos lados y ninguna parte a la vez

Sintiendo, existiendo […]

Pasando a través de ti y de mi propia morada […]

Entonces tú, humanidad maldita!

Condenada a la materia,

Encerrándome dentro de mí,

No me dejas salir! […]

No me dejas fluir en esencia existiendo, no siendo.

Sin embargo, sigo estando lejos! Siempre muy lejos.

Aquí, allá y por todas partes,

Buscando salidas, vías de escape!

Soñando con dejar el tiempo al que se me destinó:

Pero, parece que tengo contrato a largo plazo,

Estar sin pertenecer y pertenecer sin ser […]

Es el calvario que a este mundo se asignó

Ser una cosa o la otra, ¿por qué?

Si podemos ser las dos!

Ser todo y también ser nada

No le temas al temor que es lo que tocó ser.

Está aquí o allá, pero no está en ti […]

¡Existe pero no pertenece, es!

A veces es tu compañero,

Pero en otras ocasiones te destruye […]

A veces no lo encuentras.

El temor puede ser ese amigo

Que está allí sin invadirte, solo allí,

Haciendo notable su existencia:

Pero, no su consecuencia […]

Sin hambre, sin sed, solo allí

Vistiéndose de presencia […]

Estoy tan cansada, tan descargada,

 Ansiosa de salir de aquí,

De allá, de éstas líneas, de mí, ¡y entonces ser!

Ser aquí, ser allá, ser en éstas líneas […]

Y entonces encontrarme en todas partes, siendo de nadie