E. Esposito

Azul

Hoy
estaba pinta\'o en azules
mientras caminaba por esa calle,
por\'ay pa\'bajo.

 

Mar oscuro, mientras sonaba ese reggae
en la alejada taguara.
Ese reggae que no era hierba ni hoja
sino cielo nocturno.

 

Y grisáceo (como el plomo, mismo incrustado
en el pecho de algún presunto inocente).
se notaba en su ebriedad.
Puta drogadicta, con su vida acabada,
a la luz del neón afuera de un bar.

 

Un tanto más claro,
casi como el cielo vespertino,
se tornó mi noche en un cálido abrazo
de esa maltratada y sonriente mujer etílica.

 

Pero cada paso que di luego era más oscuro,
más frío y no era hielo,
sino espacio sin luz:
vacío.

 

Solitario.