Misael Gaston

allá

Allá se ve insidiosa, con ojos apagados,

con marcas de destino y señas de discordia,

allá lejana y quieta observa cautelosa,

suspira sin motivos, se ríe de su historia,

historia que las horas mataron sin piedad,

al son inquebrantable del paso de sus años,

historia que sin fruto de grandes esperanzas,

se diluyó a malezas, recuerdos de antaño.

No importa si la miro y sigue siendo hermosa,

no importa si me acerco y le hablo como antes,

no importa si sonríe de manera cariñosa,

nada se repite, todo luego es decepcionante.