Cristian Cerna Q.

¿Quién de los dos?

¿Quién de los dos?

 

Quién diría que el amor, algo tan informal,

Se presentaría ante ellos tan formalmente.

 

¿Quién diría que un comentario, de sentimientos vírgenes de esos que nos gustan,

Fueran tan prohibidos de llagar a confesar?

 

Pero la eterna pregunta persiste: ¿Quién de ellos romperá la burbuja de la inseguridad primero?

 

¿Quién de los dos al mirarse al espejo notara que en su reflejo que ahí ya hace su lado más disparejo?

 

¿Quién de los dos probara por el otro el fijo de la cuchilla antes de poder decir la verdad?

 

Aunque es casi seguro que los dos lo pensaran,

¿Quién de los dos lo dirá?

 

¿Quién de los dos asimilara la inocencia, y tirara la piedra de color a ilusión?

 

¿Quien?

 

¿Quién de los dos dirá lo que siente?

¿Quién de los dos escuchara al corazón antes que a la mente?

 

¿Quién de los dos al cerrar los ojos dibujara a su alma gemela usando como regla la figura del otro ya en el tacto?

 

¿Quién a pesar de las dudas, porque si que existen, podrá atrapar la mano del otro en forma sutil y a cambio se sentirán los choques eléctricos que emite el corazón?

 

¿Quien?

 

¿Quién debido a la fatiga-rutina se atreverá a buscar algo, mejor dicho, a alguien que les reconcilie con el romance?

 

¿Quién dejara de obedecer al teléfono para proponer verse de frente?

¿Quién romperá primero el miedo de lo que pueda decir la gente?

 

¿Quién no dejara de soñar al despertar?

¿Quién de los dos dejara de escuchar canciones sobre corazones y se enganchara a rimar?

 

¿Quién comprara las rosas?

¿Quién envolverá los chocolates?

 

¿Quién susurrara un \"Te Amo\" antes que sea demasiado tarde?