Amigo de la luna

POR UN BESO DE TI

A diario a Dios suplico

se cumpla mi deseo

de acariciar tu cuerpo,

de saborear tus besos.

Me quiebro la cabeza,

pues me has sorbido el seso

y a Dios suplico y rezo 

me conceda tu cuerpo,

me conceda tus besos.

 

¿Qué hubiera yo ofrecido

tan solo por un beso?

Gotitas de mi sangre,

mi vida, mi destino,

pedazos de mi carne,

mi sal, mi pan, mi vino,

mi alimento, mi vestido,

mis bienes materiales,

mi esperanza, mi olvido,

mi cuerpo inerte y tieso.

¿Qué hubiera yo ofrecido

tan solo por un beso?

Mi alma sin pensarlo,

si fuera necesario,

hubiera yo entregado

por lograr mi objetivo

de lograr de tus labios

tan solo un dulce beso.

 

¿Qué hubiera yo ofrecido

tan solo por un beso?

mi corazón herido,

mi bendición, un rezo.

¿Qué hubiera yo ofrecido

tan solo por un beso?

Pedazos de mi carne

además de mi vida,

mis mejores momentos

y mi alma adolorida.

Pero me es imposible

pues me encuentro perdido,

y tan solo por eso

desoigo mi destino,

y soy solo el reflejo

de aquel que un día fuí.

Y hoy, quedo, al oído 

y en mi voz un dejo,

te confieso aturdido:

¿Qué hubiera yo ofrecido

tan solo por un beso?

Y así suplico y rezo

por un beso de ti.