Patricia Aznar Laffont

Sin fin...

 

Ni la noche,

ni el claro día…

sólo las penumbras oscuras

de las estrellas opacas

y la noche de fantasmas pobladas...

 

La tormenta sigilosa

de huracanes de lluvia indómita

que aparece nefasta y fugitiva

por momentos

en mi alma deshecha,

ya casi

diluida, desaparecida

en el riguroso Pasado

y en mis ayeres invernales …

 

dibujada con trazos rudos

en aquellos cristales

que me reflejan

desmesurados, rasgados

y en vanos pedazos, destruida..

 

Sudores sucios, vagos destinos

negaciones del alba

y del Sueño..

 

Insomnio permanente…

 

Negaciones,

de los mediodías de los Otros…

de la Paz que mi alma añora,

y que rapaces engaños

la envuelven

 en la más penosas Sombras…

 

Aire denso,

vientos añosos

y tiempos no olvidados

 que surcan

mis días grises..

 

Huracanes,

siglos sin piedades,

atormentados,

e inexorables que niegan

sanar estas oscuras grietas resecas

de mi alma desmañada…

 

Y esta  búsqueda perpetua de alguna

diminuta llama

de Amor que sane…

 

Te he descubierto,

todos mis ocultos sentires, Poeta,

en estos versos ...

 

 

imágenes y voces

 repetidas como un eco cantado

por diabólicos seres distantes,

que viven en mí..

en mi alma y en los terrosos barros

que la cubren,

 

que no mueren,

por más que intente y quiera..

 

(que no tienen fin, ni descanso alguno)…