Allen Andree

DELIRIO

…Es justamente esa prohibición

la que embota mi carne

un deseo que constante

hace del cuerpo un templo en el invierno

donde los árboles con sus copas

intercambian su imagen por espejos

 

cada sensación

cada músculo compacto que te describe entre la noche

camino sin hallar

cuál será el sendero más propicio para arrastrarte a mi tugurio

hojas de lluvia

sintonía en el ambiente

ternura estéril

 

dónde has ocultado tu espíritu

que cuando es llamado no surge ni un presentimiento

y yo con las puertas abiertas

esperando sentirme vivo

ardiendo en la más peligrosa cárcel del amor…