Rafael Escobar

\"LA BAILARINA\"

 

De manera sutil rozaba el suelo,

tenuemente su imagen desplazaba,

con mi vista asombrado la miraba

cual gaviota queriendo alzar el vuelo.

 

Al compás de armonioso violoncelo

la cadencia del baile dominaba,

su figura sensual pasión manaba

de los pies a su negro y largo pelo.

 

¡Y movía su mórbida cadera

con un ritmo de suave partitura,

parecía la espléndida palmera

 

cuando el viento la toca con ternura;

y dejaba mi mente prisionera

de su frágil y elástica cintura!

 

Autor: Aníbal Rodríguez.