José López Moreno.

Te espero.

Al mirar la ventana de la nostalgia

Y solo veas los recuerdos

felices que unieron el amor,

Ahora, en desamor.

Y los labios se te rasgan 

por el frio inmenso del silencio,

las lágrimas sean bálsamo 

para el dolor del sentimiento.

Al respirar, sientas ansiedad

de querer de nuevo amar,

y el pecho este oprimido

por el vacío que lo ha vencido.

Si tus frías manos, al sol quieran acariciar,

creías que todo era invierno,

que todo perdido estaba

 porque ya no te amaba,

sin embargo, sin lagrimas

me quedaba,

¡hasta tu sombra acariciaba!

Porque jamás te olvidé.

¡Ay, amor! Te quiero vida mía,

no dudes que ahí estaré

para darte mi último aliento.