Tus ojos negros como la noche
me embrujaron en la sombra del silencio,
y me perdí.
ingeniosamente me sedujiste
y yo tan aprisa me enfoque en tus labios,
y los bese.
tu cuerpo de seda perfumado
se exhibió en la luz de las piedras de fuego,
y cai.
Sin perder el sentido me envolviste
en la energía de tus agitados suspiros,
y te amé.
AETOS
Derechos reservados de autor.
11-12-2018