Nacho Rey

CONCIERTO DEL OLVIDO

Escucho una música en los campos del amor,

siempre en mí existió un vacío de oscuridad,

tal vez por ver a la paloma muerta de dolor

o porque en verdad en mí siempre hubo virginidad.

 

La luz se hizo ceniza y mis lágrimas de ahorcado

en un jardín de lana blanca engordó la temperatura,

no reaccioné, mi muro que se hacía grande y pesado,

me cayó encima como un destino de poca hechura.

 

El pacto entre Satán y yo, lo firmé en óleo:

fue mi sentencia de muerte, mi fortuna de víctima.

No quiero ya nada más de ustedes, mi hidrógeno

se acaba y el fin pronto se hará aire pacífica.

 

La música se apaga, se apaga poco a poco,

la vela respira, y al igual que el alboroto, que es ruido,

son miles las estrellas que escuchan sólo al loco,

al loco solitario en su secreto concierto del olvido.

 

                                                          NACHO REY