Al Duborg

Espejo de estrellas

Pasaron treinta dunas

para ver tus faldas

de seda azul exprés,

con voz serena

susurras a la arena

para besar mis pies.

 

La brisa no te agita

el sol aclara y medita

de forma radiante

y el horizonte abre

las pupilas de tu amante

mientras contempla y camina.

 

Las gaviotas en su vuelo

Surcan el inmenso cielo,

 reflejan en tu agua marina

sombras de negras cortinas

 manto de turquesa el pañuelo

contrastan con el celeste velo.

 

La tarde comienza a llorar

las nubes besan en su andar

hacen estremecer las olas

la luna enciende farolas

para el crepúsculo tiznar

 espejo de estrellas del mar.