Hacia tu encuentro vengo buscando una vendimia de amor y atardeceres
Voy buscando los verdes playones de tu vientre
para posar en ellos mis labios fatigados
Un gambusino soy y voy buscando
en las altas colinas de tus pechos
la senda a la cantera de tus besos
Las garzas blancas pasan serenas a tu lado
se alejan en ascenso por el azul del cielo
buscando quedamente quizás en el ocaso
la lejana promesa de un nuevo amanecer
Así vengo a tu encuentro, con mis alforjas llenas de sol y amaneceres