Adrian Labansat

llamas

No sé si me ha llamado o me derramó,

estoy aprendiendo a prender

para ahogarme en el fuego de sus manos.

 

Dejo su lumbre en mí,

en su ausencia todos los días amanece un muerto.

 

Resumo lo lejos como lo vivido y lo fallecido,

recordarlo es incinerarse lo unidas que estuvieron nuestras manos.